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Es de noche y en el edificio de la familia fantástica, está a punto de suceder algo maravilloso, Mamá fantástica, está espiando a su hijo, que se encuentra dormido, nuevamente teniendo ese sueño húmedo con su madre. Ella se apiada de él, así que se mete en esa cama, le baja el pantalón de la pijama y empieza a mamarle el pene, su intención es colocárselo duro, para que este jovencito experimente un verdadero placer. Poco a poco esa pequeña polla fue colocándose tiesa, esto debido a la buena mamada y comida de bolas que estaba recibiendo, él aún estaba somnoliento, pero gemía cada vez que su madre enrollaba su lengua y bajaba hasta la base de ese pene. Finalmente este chico abrió los ojos, pensó que estaba en el sueño, pero su madre le explica que era realidad y ella vino a ayudarlo. Se sentía un poco avergonzado, ella le pidió que se relajara, ella estaba dispuesta hacer su sueño realidad, por ende, la polla de este chico, minutos después se encontraba dentro de la cálida boca de esa preciosa rubia. Él quería devorarla de pies a cabeza, estar dentro de ella y hacerla suya, a esta petición, se subió en el regazo de su hijo y comenzó a cabalgar.