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El travieso Jimmy estaba en la cocina de su casa, pero no encontró hielo ni algo para beber y divertirse mientras se quedaba en ese lugar aburrido, su madre entro a este lugar, el pensó que tenia la casa a solas para él. Ella no le gustaba que su hijo bebiera, le iba decir a su esposo que le quitara los derechos, además lo convencería de no darle más dinero. Jimmy al verse en esta situación tan peliaguda, le dijo a su sexy madre que hará lo que sea para que esto quedara entre ellos, esto le pareció muy interesante a esta picara señora.  Ella lo acosa en la cocina, le aprieta el paquete de este joven, el quedo asombrado por este acto tan inesperado de su madre, pero solo su silencio será complacido de esta manera. Se agacha, le saca la polla del pantalón, comienza hacerle una buena mamada, solo estaba esperando la reacción de su hijo ante este placer que le estaba brindando. El era un hombre y no podía resistirse a los atributos de una buena mujer, y su madre lo era, la subió a un mesón, la abrió de piernas y comenzó a chuparle el coño y con su lengua jugaba con el clítoris, ambos obtuvieron lo que querían, ella sexo y el silencio.